El agujero en la capa de ozono permite el paso de radiaciones que dañan a los seres vivos, aunque no afecta mucho al calentamiento global pero, un equipo de científicos británicos descubrieron que el ozono puede dañar el medioambiente en las capas bajas de la atmosfera, con lo que se favorece el calentamiento global.
Desde mediados del siglo XIX la cantidad de ozono que se encuentra en la superficie de la Tierra se ha duplicado como consecuencia de las emisiones de los vehículos y la industria, y quema de bosques. El ozono es toxico pero tiene poca presencia en el aire que respiramos, por lo cual no es un peligro. Pero según los investigadores del estudio, el aumento del ozono en las capas bajas puede reducir el ritmo de crecimiento de las plantas, y por consecuencia la capacidad de las mimas de absorber dióxido de carbono.
Vía El mundo
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