Investigadoras del Instituto de Química de la UNAM, encabezado por Emma Maldonado Jiménez y Ana Lidia Pérez Castorena, se encuentran estudiando a las plantas del género Physalis, con potenciales propiedades antibacterianas, anticancerígenas e hipoglucemiantes, en la familia de las Physalis encontramos la que produce el tomate verde.
Por decadas las cáscaras de tomate verde se han utilizado para té y con este bajar los niveles de azúcar en la sangre, que es lo que hacen los hipoglucemiantes. En teoría, al utilizar especies de Physalis se podrían obtener antibióticos contra ciertas enfermedades, aunque en el caso del tomate verde, se cultiva mucho pero en el país solo se usa el fruto y el resto de la planta se desperdicia; sin embargo el resto del tomate contiene al menos 10 compuestos, por lo que si alguno de ellos resulta útil, podría aprovecharse de mejor manera.
Castorena indicó que la cubierta del tomate es rica en acilsacarosas, formados por el azúcar común pero esterificada con ácidos grasos. En los EEUU algunas compañías ya sintetizan estas sustancias, algunas aprobadas por la Federal Drug Administration como sustitutos grasos por sus propiedades organolépticas (sabor, olor, color, tectura) y porque cuando tienen cinco o más ácidos grasos el organismo no las degrada y las excreta. De hecho, ya se usan en botanas y frituras, como sucedáneos, lo que ayuda a combatir la obesidad. México es el país con mayor número de especies de Physalis, en el planeta existen entre 90 y 120 especies de estas plantas, de las cuales en México existen 70, la mayoría son endémicas. De todas las especies conocidas sólo una no es originaria de América.
En el mercado existe una gran variedad de antibióticos pero, ¿para que obtener uno de las Physalis?, la razón es sencilla, cuando se ataca a un microorganismo con cualquier antibiótico, este al tiempo deja de funcionar debido a que el microorganismo se hizo resistente, lo mismo sucede cuando estas en tratamiento medico y dejas de tomar tus pastillas o la dosis es baja, el microorganismo se hace resistente al medicamento. Desde el año 2000 comenzaron las investigaciones en la UNAM de las especies de la familia Physalis porque les llamó la atención que la gente usara las cáscaras del tomate verde para disminuir los niveles de azúcar en la sangre.
Castorena indicó que la cubierta del tomate es rica en acilsacarosas, formados por el azúcar común pero esterificada con ácidos grasos. En los EEUU algunas compañías ya sintetizan estas sustancias, algunas aprobadas por la Federal Drug Administration como sustitutos grasos por sus propiedades organolépticas (sabor, olor, color, tectura) y porque cuando tienen cinco o más ácidos grasos el organismo no las degrada y las excreta. De hecho, ya se usan en botanas y frituras, como sucedáneos, lo que ayuda a combatir la obesidad. México es el país con mayor número de especies de Physalis, en el planeta existen entre 90 y 120 especies de estas plantas, de las cuales en México existen 70, la mayoría son endémicas. De todas las especies conocidas sólo una no es originaria de América.
En el mercado existe una gran variedad de antibióticos pero, ¿para que obtener uno de las Physalis?, la razón es sencilla, cuando se ataca a un microorganismo con cualquier antibiótico, este al tiempo deja de funcionar debido a que el microorganismo se hizo resistente, lo mismo sucede cuando estas en tratamiento medico y dejas de tomar tus pastillas o la dosis es baja, el microorganismo se hace resistente al medicamento. Desde el año 2000 comenzaron las investigaciones en la UNAM de las especies de la familia Physalis porque les llamó la atención que la gente usara las cáscaras del tomate verde para disminuir los niveles de azúcar en la sangre.
Vía El universal
0 opiniones:
Publicar un comentario