Una langosta que se cree que tiene 140 años será liberada de su confinamiento en un tanque de un restaurante de Nueva York. La langosta lleva el nombre de George, pesa 9 kilos y regresará al océano donde fue capturada hace 2 semanas. La langosta fue comprada por 100 dólares por el restaurante City Crab and Seafood y rápidamente fue adoptada como mascota, posando para fotografías con los dueños del establecimiento pero, el grupo defensor de los derechos de los animales solicitó la liberación de la langosta y ahora será devuelta al mar.
Será liberada en algún punto de las aguas cercanas a Kennebunkport, donde está prohibida la colocación de trampas. El gerente del restaurante, Keith Valenti, indicó que nunca tuvo la intención de herir a la langosta y que la decisión de mantenerla en el tanque fue hecha para ofrecer a los clientes una distracción extra. "Compramos una langosta grande, comenzamos a tomar fotografías con los niños y funcionó muy bien", dijo Valenti a la agencia de noticias Reuters.
Vía BBC
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